Nicolas Daubanes está presente en la nueva exposición de la Colección Lambert, "Alquimia de Encuentros," visible hasta el 5 de enero.
Un Impulso Creativo en Movimiento Continuo
Una colección de arte contemporáneo es, ante todo, una promesa de descubrimiento en permanencia, un encanto que se renueva continuamente y se comparte a través de encuentros. Durante siete meses, el programa de exposiciones “Alquimia de Encuentros” presenta una nueva muestra de obras de la colección Lambert en ambas casas señoriales del siglo XVIII.
Como cuadrados en un juego de mesa, cada sala del museo lleva un tema distinto, evocando la rica historia de esta extraordinaria institución. En este arreglo lúdico, las obras de diferentes épocas y géneros se entrecruzan a través de sus conexiones con la poesía, la literatura y la historia del arte. En medio de esta riqueza de referencias, libros, ficciones y recuerdos personales, también se exhibirán varios objetos misteriosos de museos vecinos o de prestados por colecciones amigas
Como un viaje a través del pensamiento y el tiempo, ciertas pistas recordarán a los visitantes atentos y a los habituales del museo las grandes exposiciones pasadas como “À Fripon Fripon et Demi,” “La Desaparición de las Luciérnagas,” y “Figuras del Actor.” Algunas salas también destacarán figuras prominentes de la colección, como Cy Twombly, Marcel Broodthaers, Anselm Kiefer y Richard Long, cuya instalación de 1969 será reactivada por primera vez.
Haciendo referencia a los protocolos de las nuevas vanguardias americanas apoyadas por Yvon Lambert desde la década de 1960, donde las obras sirven como guías para nuevas experiencias sensoriales, las salas de exposición definen sus propias reglas de compromiso, invocando presentaciones monográficas, exposiciones colectivas y eventos efímeros por turnos.
Esta generación de pioneros defendida por Yvon Lambert (artistas conceptuales, minimalistas, land artists, artistas de actitudes) será convocada a través de la reactivación del protocolo imaginado por John Cage en 1993: Rolywholyover A Circus. Más de 60 obras de las décadas de 1960 y 1970 se reinstalarán permanentemente a la vista del público, según directrices precisas de un software diseñado específicamente para la exposición. Al subvertir las convenciones habituales de la institución, este protocolo de montaje invita a una renovación perpetua y revela la poesía detrás de las rutinas diarias de los instaladores, armonizando con las obras de arte y las reglas de exhibición del museo para crear un ballet de un nuevo tipo.
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